Toses, no puedes respirar, estás lleno de mocos, a veces con fiebre pero a veces no… tienes bronquitis. Es hora de poner manos a la obra y preparar los remedios caseros que te van a hacer sentir recomendable ¡y que no te pare la bronquitis!

La congestión en los bronquios se debe casi siempre a un proceso infeccioso o vírico, algo bastante común en todas aquellas personas que suelen sufrir problemas de asma, alergias, o incluso en fumadores de larga duración.

Las enfermedades respiratorias que afectan a los bronquios requieren siempre de un tratamiento muy específico que nos pautará nuestro médico, no obstante, nunca está de más conocer esos remedios caseros que tanto nos pueden ser útiles en el día a día.

Tampoco podemos olvidar que la naturaleza dispone de maravillosos aliados con propiedades tradicionales que nos ayudarán a aliviar el clásico dolor en el pecho, a reducir la infección y a expulsar también esas mucosidades que inflaman los bronquios.

Es habitual que una inflamación en los bronquios curse también con molestias en la garganta, dolor en los senos paranasales y la clásica tos que tanto agotamiento provoca.

Debemos tener en cuenta que estas enfermedades suelen ser muy delicadas en el caso de los niños y los ancianos, así que es importante que priorices siempre las pautas médicas. No obstante, existe un remedio casero muy clásico a base de cebolla que resulta muy útil para complementar cualquier tratamiento médico y que nos va a ayudar en los siguientes aspectos:

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  • Dilatar los bronquios.
  • Reducir la inflamación.
  • Hacer que la mucosidad deje de ser tan espesa y pueda eliminarse con más facilidad.
  • Aliviar la infección y los procesos bacterianos.
  • Descongestionar los bronquios en caso de que seamos fumadores.

Toma nota ahora de cómo puedes preparar este sencillo remedio.

Remedio casero a base de cebolla:

Ingredientes

  • 1 litro de agua
  • 2 cebollas
  • 2 cucharadas de miel (50 g)
  • 100 g de eucalipto

Preparación

  • Este remedio tradicional puedes prepararlo todos los días para beneficiarte de él de dos modos muy interesantes: a través de los vahos y bebiendo su infusión. Para ello, lo que haremos en primer lugar será pelar las cebollas y cortarlas en trocitos. Una vez el agua haya empezado a hervir, añade los 100 gramos de eucalipto, las dos cucharadas de miel y la cebolla.
  • Deja que se haga la cocción a lo largo de media hora. Después, apaga el fuego y, con cuidado de no quemarte, colócate una toalla en la cabeza para poderinhalar el vaho durante unos diez minutos. Intenta respirar con calma y profundidad. Es un remedio maravilloso para aliviar los bronquios congestionados, tanto en niños como en adultos.
  • ¿Qué haremos después? Una vez este preparado se haya enfriado, cuela todo el contenido para quedarte con el agua tradicional. Puedes ir bebiendo a pequeños sorbos a lo largo del día. Te aseguramos que el sabor es muy agradable.
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Infusión a base de cúrcuma:

En nuestro espacio te hablamos muy a menudo de los grandes beneficios de la cúrcuma para tu bienestar. Ahora bien… ¿Sabías que esta especia tan valorada es además un remedio natural para tratar la bronquitis? Ello se debe a la “curcumina” y a su acción antibronquial y antiinflamatoria.

Para beneficiarnos de ella podemos incluirla como una especia más en nuestros platos, puesto que, como ya sabes, además de aportar un sabor muy original también ofrece color a nuestros arroces. No obstante, nosotros te recomendamos que te prepares cada día por las mañanas esta infusión tradicional para tratar losbronquios congestionados y, si lo quieres, también puedes tomar otra al final del día.

Ingredientes:

  • 15 g de té verde
  • 3 g de cúrcuma
  • La piel de medio limón
  • 1 cucharada de miel (25 g)
  • 1 vaso de agua (200 ml)

Preparación:

Empezaremos como siempre poniendo a hervir ese vaso de agua. Cuando ya esté atemperado, añade la cúrcuma, el té verde y la peladura del medio limón (que previamente habremos lavado). Permite que se haga esta cocción durante 20 minutos y, después, deja que repose otros 10. Cuela la bebida, endulza con miel y bebe poco a poco, aprovechando también el vaho de esta infusión para inhalarlo. Te relajará.

Puedes hacer una infusión por la mañana y otra por la tatempera a lo largo de 4 días.

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Infusion de jengibre, eucalipto y limón

¿Sabías que el jengibre es una planta que tiene maravillosas capacidades para regenerar la bienestar del aparato respiratorio? En efecto, y todo se debe a sus propiedades expectorantes y antibacterianas presentes en esta raíz tradicional que nunca debería faltar en tu cocina. ¿Quieres saber cómo prepararlo?

Ingredientes:

  • Un vaso de agua (200 ml)
  • 3 g de jengibre rallado
  • 1 cucharada de jugo de limón (15 ml)
  • 4 hojas de eucalipto
  • 1 cucharada de miel (25 g)

Preparación

Esta infusión para tratar los bronquios congestionados puedes prepararla dos veces al día. Para ello, empieza como siempre hirviendo el vaso de agua. Una vez esté bien atemperado, añade el jengibre, las hojitas de eucalipto y la miel. Permite que cueza durante 20 minutos, para después, dejar que repose. Por último, añade el jugo de limón. Bebe poco a poco, el sabor es muy agradable.