Metta (Pāli) o maitrī (sánscrito) es traducido como amabilidad con cariño, simpatía, benevolencia, amistad, buena voluntad, amor o interés activo por los demás.
Es uno de los diez paramitas del budismo theravada y el primero de los cuatro Brahmavihāras. El mettā bhāvanā (cultivo del mettā) es una forma de Meditación budista muy popular.
El objeto de la meditación Metta es el amor con desprendimiento. Tradicionalmente, la práctica comienza con el practicante cultivando el amor desenfocado hacia sí mismo, después para con la gente que ama, amigos, maestros, extraños y enemigos hasta cultivar el amor por la totalidad de seres vivientes.
Los budistas creen que aquellos que cultivan el Metta consiguen alejarse de los gustos y la hostilidad. Los maestros budistas recomiendan la meditación en Metta como un antídoto contra el insomnio y las pesadillas. Generalmente las personas que practican Metta se encuentran más confortables y son más felices. Irradiar Metta contribuye además a un mundo con más amor, paz y felicidad.
La meditación metta es un buen modo de calmar una mente angustiada y un antídoto contra la ira. De acuerdo con esto, alguien que ha cultivado Metta no tendrá miedo fácilmente y podrá subyugarlo siendo más cariñoso, amoroso y más tendente al amor incondicional.
EL REZO
Compartimos con vosotros el rezo del Amor Universal, una de las oraciones budistas que podemos rezar:
Que todos los seres que existen,
Débiles o fuertes,
Largos, grandes, medianos
Bajos, pequeños o gruesos,
Que todos los seres que existen,
Conocidos o desconocidos,
Cercanos o lejanos,
Nacidos o por nacer,
Que todos los seres sin excepción estén felices.
Que nadie engañe ni desprecie a otra persona en ningún lugar;
Que no desee el daño de los demás con enojo.
Así como una madre protege a su única hija o hijo a costa de su propia vida,
De la misma forma uno debe cultivar un corazón sin límites hacia todos los seres.
Que los pensamientos de amor llenen todo el mundo,
Arriba, abajo y a lo largo;
Sin ninguna obstrucción, sin odio, sin enemistad.
Parada, caminando, sentada o acostada, mientras despierta,
Una debe cultivar esta meditación de amor.
Su vida traerá el cielo a la Tierra.
Namu Amida Butsu.