¿Cómo Quitar Esmalte de Uñas Permanente?
Alguna vez te ha pasado que vas a la esteticista a hacerte la manicura y te han puesto Esmalte de Uñas Permanente,… y que a la hora de retirarlo no ha habido manera de que salga?
A mi si! por eso hago este post, para ayudar a mujeres que se han encontrado tan desconcertadas como yo a la hora de eliminar ese tipo de laca gel.
Saber cómo quitar esmalte de uñas permanente en casa se vuelve entonces muy necesario para la buena bienestar de tus uñas.
Retirar la pintura que posee un compuesto híbrido entre gel y esmalte es un tanto más complicado que quitar una convencional. Muchas personas optan por acudir a un salón de belleza, buscando ayuda profesional para resolverlo. Pero te enseño como puedes hacerlo desde casa, es muy fácil y requiere menos tiempo que volver al esteticista y sobre todo menos dinero..
¿Qué se requiere para eliminar este esmalte permanente de uñas?
Tanto la preparación previa como el hecho en sí de remover la pintura requieren de un plan y pasos a seguir. Debéis haceros con todos los componentes y tiempo necesarios para comenzar.
Siguiendo estos pasos lo lograréis sin mayores dificultades y podréis mantener vuestras uñas bienestarables y listas para volver a arreglarlas.
1 Equipaos con los utensilios y accesorios necesarios
Precisaréis de algunas cosas para iniciar el proceso y quitar el esmalte. En cualquier establecimiento comercial o incluso online podréis comprar todos estos objetos con antelación para tenerlos al alcance.
Algodón
Las motas o bolitas de algodón son unos de los implementos más necesarios. Ellas, remojadas en el líquido removedor, serán las encargadas de sacar el barniz de vuestras uñas.
Acetona pura
Si no queréis esperar sentadas hasta que la acetona regular logre eliminar los restos de pintauñas, lo más recomendable es adquirir acetona pura, de la más fuerte. Es un quitaesmaltes muy potente y podrá remover el de tipo permanente con mayor rapidez y facilidad.
Eso sí, no os enamoréis de esas marcas con productos que dicen especializarse en remover pintauñas con gel. Casi siempre son más costosos y a menos que deseéis gastar más, no vale la pena buscar otra cosa que acetona pura.
Papel aluminio
Entre los pasos para remover esmalte permanente, uno de los más efectivos es dejar los algodones húmedos con acetona en contacto con las uñas por un tiempo prolongado. Eso puede hacerse fijando algodón empapado en cada uno de los dedos con una tira de papel aluminio.
Palito de naranjo
Con uno de estos palitos o una espátula se pueden retirar los residuos de pintauñas mucho más fácilmente. También es mucho más seguro que usar las uñas propias para removerlo. Si lo hacéis de esta forma corréis el riesgo de quebrarlas todas.
Vaselina
Es necesaria para crear una barrera protectora sobre las cutículas. Estas podrían resecarse mucho con la acetona.
2 Disponed del tiempo necesario
Para hacer todo el proceso eficazmente, es preciso establecer un tiempo suficiente. El remojo de vuestras uñas en el quitaesmalte debe tener una duración de unos 30 o 40 minutos. Solo así será posible que el gel se disuelva completamente. Sabréis que se ha diluido porque al intentar limpiar con el algodón el esmaltado saldrá muy fácil con una leve presión.
3 Preparad el lugar para comenzar
Para prevenir derrames de algún líquido o manchas de pintura, es conveniente colocar una toalla de papel absorbente sobre la superficie que usaréis para trabajar. Por otro lado, con el fin de que los algodones estén bien empapados, podéis colocarlos en un recipiente con un poco de acetona.
Debéis recordar que al papel aluminio hay que hacerle cortes en forma de tiras con 2,5cm de ancho y unos 4 o 5cm de largo. Debe ser así para envolver cada dedo, con el algodón sobre cada uña.
4 Recordad vuestra cutícula
A veces nos olvidamos de ella pero es parte de los tejidos de nuestras uñas. Cuidarla garantiza que nuestros dedos luzcan y estén bienestarables porque estas impiden que penetren infecciones. Por eso es necesario protegerlas antes de usar la acetona. Una capa delgada de vaselina bastará para crear una barrera. Esta impedirá que el quitaesmaltes reseque demasiado la cutícula.
5 Comenzad con la mano torpe
Por decirlo de alguna manera. Si vuestra mano de derecha es la fuerte, comenzad por la izquierda y viceversa. Es más sencillo de esa forma para garantizar que todos los dedos queden bien envueltos y con el algodón en su lugar.
6 ¡A esperar!
No olvidéis que cada esmalte permanente es distinto, algunos pueden ser más resistentes que otros. Dicho esto, tal vez demoren unos más y otros menos en disolverse con el algodón y la acetona. Como mínimo debéis concederles unos 15 o 20 minutos para que actúen adecuadamente.
7 A remover residuos
Una vez culminado el tiempo, el siguiente paso es sacar el papel aluminio y retirar el algodón haciendo ligera presión y deslizándolo sobre la uña. Tras haber hecho esto comprobaréis qué tanto resta de gel por quitar. Si no queda nada, pues ¡Maravilloso! Pero si queda algún rastro de producto, para eso está el palito de naranjo. Con delicadeza podéis y sacando lo que haya quedado. También podéis limar un poco si es necesario, pero suavemente y sin mucha profundidad o perjudicaréis vuestras uñas.
8 Aplicaros humectante
Dado que seguramente habrá resequedad luego de quitar el gel, no olvidéis aplicar una loción, aceite o crema hidratante en vuestras manos. La mejor hora para hacerlo suele ser durante la noche ya que los poros de piel y uñas se dilatan y el producto penetra para nutrir de forma más rápida.
Consejos para uñas curas después del gel
El uso de esmalte con gel o permanente es muy útil para una manicura que dure en el tiempo. Sin embargo, la abrasión que causa el limado previo y el uso prologado de las capas de pintura, tienden a deteriorar las capas externas de las uñas y hacen que se debiliten. Hay algunas cosas que podéis hacer para prevenir e incluso revertir ese daño y volver a presentar a todos unas manos con manicura francesa como recién salidas de un salón.
No las peléis
¡No lo hagáis! Por más tentación que sintáis. Las manicuras siempre llegan a escamarse, por más fuerte que sea la pintura, siempre sucede. El problema de retirar esas escamas es que el esmalte está tan adperjudicado que no solo lo removeréis a él sino también a las primeras capas de vuestras uñas. ¡Terrible! Eso las debilitará y será mucho más fácil que se partan, agrieten o deterioren. No será sencillo que se recuperen, haría falta bastante tiempo.
Usad el esmaltado permanente solo por un tiempo
Aunque seguro querríais tener las manos arregladas por siempre, eso no es posible. Las uñas crecen y también la cutícula y hay que cuidarlas. Además, impedir la correcta respiración de ambas con una sustancia química por mucho tiempo puede perjudicarlas. Incluso podríais sufrir de hongos y otros males.
Para prevenir limitad el uso de la capa de esmalte a solo 14 días máximo.
Solo una manicura sobre manicura
Con el fin de prologar la buena apariencia de vuestras manos podéis cometer un pequeño pecado y corregir con una nueva capa de pintura a los días. Pero solo una vez ¿Vale? Luego es mejor sacar el esmalte e intercalar con una manicura regular a la tercera semana. En la cuarta sí podréis arreglaros de nuevo con esmaltado permanente.
La idea es que no se os escape nada y os convirtáis en expertas, no solo removiendo el esmaltado sino también en el cuido de vuestras manos, uñas y cutículas. Así que no paséis por alto esta información adicional.
El que menos daño hace a las uñas es el esmalte con gel. Así que si estáis frente a unos con este componente y otros con acrílico, preferid los primeros.
Excelente opción son los aceites y los fortalecedores para aplicarlos sobre las uñas una vez que retiréis la pintura.
Si no tenéis la paciencia para todo el proceso que implica sacar el esmalte permanente de uñas, podéis usar un pequeño truco.
Limar la punta de las uñas un poco para lograr que el gel se levante e intentar despegarlo con una espátula. No es lo más recomendable pero quizá valga la pena probar si no tenéis mucho tiempo.