La linaza o semillas de lino son uno de los elementos naturales que más beneplácito suelen tener dentro de las personas que quieren perder volumen de manera natural. ¿Por qué? Porque tienen aportes realmente valorables para los que buscan reducir, siempre tomando a este cereal como un complemento de una dieta equilibrada, acompañada de actividad física.

El o infusión de linaza, semilla de la planta de lino, cuyo nombre científico es Linum usitatissimum, posee muchos usos tradicionales y aplicaciones curativas que están determinados por las propiedades de los principios activos presentes en su composición.

La planta de lino es originaria de la región de los ríos Éufrates, Tigris y Nilo, y sus semillas se utilizan tanto para la elaboración de harina como para la preparación de deliciosas infusiones.

Mientras que el aceite de linaza es rico en ácidos grasos omega 3, omega 6 y omega 9 (siendo a su vez muy utilizado en la industria cosmética), la linaza en sí misma como alimento destaca por su riqueza en ácidos grasos poliinsaturados, fibra dietética y fitoquímicos (como los lignanos).

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La infusión de linaza es muy útil para tratar problemas de digestión lenta. Para esto es necesario dejar reposando durante 12 horas las semillas de linaza, en un vaso de agua. Este brebaje se debe beber principalmente en ayunas. Si se le añade anís, se suman las propiedades estomacales, carminativas –para aliviar los gases-, antiespasmódicas y sedantes.

El té de linaza, tiene propiedades diuréticas, ya que actúa activando la función renal, generando un aumento en la eliminación de líquidos del organismo, debido a esto es muy útil para tratar casos de cistitis e infecciones urinarias, también ayuda a prevenir la aparición de cálculos renales. Además disminuye la inflamación de los riñones y también de la vejiga e hígado.

Para la preparación de la infusión de linaza con anís, se requieren los siguientes ingredientes:

25 gramos de linaza.
1 cucharadita de anís.
1 litro de agua.
La preparación de la infusión de linaza se realiza de la siguiente forma:

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En primera instancia se coloca a hervir los 25 gramos de linaza y el anís en el litro de agua en una olla.

Se debe dejar hervir por aproximadamente 20 minutos.

Luego se deja reposar unos 5 minutos, se cuela y se sirve.

Beneficios de la infusión de linaza

Estimula el buen funcionamiento de los riñones, siendo útil para depurar los riñones y para regenerar la propia función renal.

Previene y trata la retención de líquidos.

Ayuda en el tratamiento de las infecciones urinarias (y cistitis).

Previene la formación de cálculos renales (piedras en los riñones).